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«Nosotros sentimos que incluso si todas las posibles cuestiones científicas pudieran responderse, el problema de nuestra vida no habría sido más penetrado».
Ludwig Wittgenstein
Entonces, en ese punto, habiendo respondido a todas las preguntas, ya no queda pregunta alguna, y esto es precisamente, no la respuesta, sino el punto de partida.
El Sentido de la Existencia solo se puede observar fuera de toda pregunta, fuera de todo lenguaje, fuera del mundo.
¿Y qué hay fuera del mundo?
Más mundos, desde los que observar éste. Y otros desde donde observarlos. Y fuera de todos ellos, más allá de lo concebible es donde reside lo inenarrable, lo inexpresable, lo inmanejable, lo incondicionado y, por tanto, donde reside la libertad.
Pensar sobre todo esto es estéril. Este viaje no se hace a través del mundo porque lo que estamos haciendo es precisamente escapar de él. Este viaje no se hace a través del pensamiento porque lo que estamos haciendo es precisamente escapar de él. Aprendiendo a salir del mundo, del lenguaje para verlo por nosotros mismos. Y cuando alguien pregunte solo se podrá decir, míralo tú.
Y volverás con todas las respuestas, viendo a tu alrededor la verdadera naturaleza de la realidad que es estática, inflexible y rígida. Has visto el truco del mago y para ti la magia ha terminado. No más ilusiones. No más felicidad. No más sufrimiento.