La Renta Básica Incondicional (RBI), también llamada Renta Básica Universal, Ingreso Ciudadano, Universal Demogrant o Basic Income, es una forma de sistema de seguridad social en la que todos los ciudadanos o residentes de un país reciben regularmente una suma de dinero sin condiciones, ya sea desde un gobierno o alguna otra institución pública, además de cualquier ingreso recibido de otros lugares. La recibe todo miembro de pleno derecho o residente de la sociedad incluso si no quiere trabajar de forma remunerada, sin tomar en consideración si es rico o pobre o, dicho de otra forma, independientemente de cuáles puedan ser las otras posibles fuentes de renta, y sin importar con quién conviva. Existen justificaciones libertarias, republicanas, éticas, económicas, post-obreristas e incluso de defensa de la propiedad privada. ¿Sabes cuál es la razón por la que se implantaría? En un mundo con el trabajo ya desvalorizado y que ni siquiera entra ya en las variables macroeconómicas y con la perspectiva de su disminución a medio plazo (aplicando la tecnología de hoy día en veinte años habrán desaparecido el 62% de los empleos) y su total desaparición a largo (en 2030 existirán tecnologías suficientes para que las máquinas ejecuten cualquier trabajo fundado en el razonamiento y la lógica) la inmensa mayoría de los humanos, seres serviles y mostrencos económicamente, se quedarán sin medio de subsistencia. Esto se engarza en la dinámica del dinero, que es la cadena del esclavo del Estado. Si no hay trabajo, ¿para qué quiere el Estado el dinero? ¿para qué quiere contribuyentes? Solo los ricos organizando unos medios de producción autónomos que satisfacen cualquier necesidad. No hay nada que el pobre pueda ofrecer ya al rico. Ni trabajo, ni bienes, ni siquiera sexo. Ante esto, los oligarcas en Davos se empezaron a dividir entre más compasivos y menos. Los primeros prefieren que la evolución natural de las cosas siga su cauce y que a las masas humanas se las lleve el viento de la historia. Los menos compasivos se decantan por la implantación de una renta básica modulada, de forma que existan pobres, en mayor o menor medida según el importe de la RB que se quieran dar. Así, el dinero mantendría su función. Esta última postura tiene muchos alicientes, porque de ser necesario, en un momento determinado con solo anular la RB se exterminaría a los pobres, ya carentes de todo recurso de subsistencia. El otro aliciente, el principal es, que ni no hay pobres… ¿Qué sentido tiene ser rico?. Avidez contra ignorancia… ¿quien ganará?
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